Experiencia y dedicación en mejorar tu vida.

 

Aunque estoy formada en Psicología Cognitivo-Conductual, a lo largo de mi vida he ido adquiriendo distintos aprendizajes y conocimientos que hoy me sirven para dar mi propio enfoque personal en la aplicación de las terapias, usando las distintas disciplinas, metodologías o escuelas en las que me he ido formando.

 

Me gusta decir que la base de mi forma de trabajo es la escucha y comprensión del cliente, aquí empieza la verdadera terapia. Te vas a encontrar a alguien que te entiende, no te juzga y respeta tu forma de pensar.

 

Todos los tratamientos son personalizados y voy adaptándolos a tus necesidades en cada etapa de la intervención, decidiendo juntos el objetivo final y cómo alcanzarlo.

 

Cómo trabajo:

Estoy abierta a la sensibilidad de cada cliente, puede que una persona necesite hacer una terapia de larga duración enfocada a cambios profundos en su vida, otra es posible que busque solucionar sus conflictos puntuales de una forma práctica a través de la psicología congnitivo-conductual y otra, tal vez prefiera buscar en su interior la solución desde un enfoque más humanista o existencial.

 

Entiendo que la terapia es parte de un todo: cuerpo, mente y espíritu forman esa unidad que llamamos persona. Cada persona es completa en sí misma y si se desequilibra una parte perdemos la armonía en nuestra vida. Por lo tanto, lo que reclama un trastorno es volver al equilibrio perdido durante alguna parte de ese trayecto que es la propia vida.

 

En cualquier terapia lo que busco es que, cuando hay un conflicto o desequilibrio (físico, mental, emocional o energético) lo trabajemos desde todas sus dimensiones, a fin de que sea la propia persona la que lo resuelva. Lo consigue encontrando sus propios valores y transformando sus limitaciones en oportunidades de aprendizaje y crecimiento personal.

La transformación provoca deseo y rechazo a la vez.

La resistencia al cambio es solo miedo.

 Te cuento mucho más en el blog…