Podemos ser más felices

Insistimos en tareas que no nos aportan felicidad, pensamos que es lo que nos ha tocado y no buscamos una alternativa.

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Si te fijas, la gran mayoría de todos los que conoces se quejan de su trabajo, es tan común hacerlo que se da por hecho que TODOS estamos deseando que llegue el viernes para dejar el trabajo y hacer…lo que sea.

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Pero existe también la gente que no se conforma y busca la manera de estar bien esas 8 horas diarias que pasa compartiendo su vida con la tarea que ha decidido hacer. Y digo “decidido” porque ahí todo tenemos elección, si estás haciendo una tarea es porque te has preparado para ello, no has querido visualizar otra cosa, es lo que has creído que te toca hacer.

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Nuestros sueños primero, y nuestra acción después, nos pueden llevar al lugar que queremos ocupar. Fijando la atención en lo que buscamos, tarde o temprano llegamos a alcanzarlo. Solo si no lo creemos no llegaremos nunca.

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Si no estas demasiado cómodo, pero no puedes cambiar de trabajo de momento, búsca las ventajas de la situación en la que estás, seguro que hay cosas buenas y que te serviran en tu propósito para crecer y, llegado el momento, cambiar a tu trabajo soñado.